Las preciosas cualidades de la respiración que desarrollamos en Yoga nos conducen a estados que quizás nunca has experimentado antes. Son espacios en los que los sentidos se repliegan, las sensaciones físicas se diluyen y la experiencia interior se hace presente.
Con una mente aquietada, desapegada surge la claridad mental. Al descubrir nuestros condicionamientos (sentidos, emociones, pensamientos, hábitos, etc.) y aceptar que surgen del funcionamiento natural de nuestra mente, ¡llega la comprensión y nos hacemos más libres!
Yoga es una forma de vivir consciente, con una parte de tu mente conectada a tu interior hagas lo que hagas, poniéndole conciencia.
Las cualidades de la respiración en Yoga son DIRGHA Y SUKSHMA:
- DIRGHA: alargada.
- SUKSHMA: profunda, consciente, sutil y silenciosa.
Sukshma prima sobre dirgha, nunca alargaremos más si peligra lo profundo, consciente, sutil y silencioso.
Estas cualidades son la esencia de toda práctica respiratoria. En este sentido, el trabajo con la respiración nunca debe ser un control, ya que el control corresponde al ego. Todo lo contrario, es una forma de fluir y de ser espontáneo. Lo esencial es extender la conciencia de la respiración abandonándose y yendo al interior del propio ser.
El proceso respiratorio que normalmente es automático e inconsciente, en la práctica de Yoga se vuelve consciente.
Regular la entrada y salida del aliento hace que se equilibre la circulación de energía por los canales nasales, lo que influye en nuestra actividad mental y del sistema nervioso.
ℹ️ Estabilizar, alargar la respiración, hacerla más consciente mejora y fortalece la salud equilibrando lo psíquico con lo fisiológico.
🤔 Hay más motivos que nos animan a practicarla en clase y en nuestro día a día:
- Proporciona claridad mental, concentración. Equilibra la relación entre los dos hemisferios cerebrales.
- Fortalece el sistema nervioso mejorando la respuesta del organismo a estados de estrés y ansiedad.
- Incrementa la vitalidad y la capacidad pulmonar. Se ejercitan y fortalecen los músculos de la respiración.
- El movimiento del diafragma masajea y bombea los órganos y músculos internos del cuerpo.
- Mejora la nutrición celular y la limpieza del organismo, siendo el mejor mecanismo de purificación y renovación intercelular.
La práctica de estas cualidades nos llevan a PRATYAHARA: interiorización, profundización, llevar los sentidos hacia el interior.
Pratyahara está en el medio entre el Yoga más externo (asana, pranayama, yamas, niyamas) y el Yoga interno (dharana, dhyana, samadhi) en el camino hacia el estado de fusión, de conexión con el interior, con lo profundo.
Conseguir una mente aquietada, purificada, no condicionada, desapegándonos de pensamientos, emociones, cuerpo, materia.
No se trata de rechazar los estados que nos dominan y condicionan, sino aceptarlos con confianza. Aceptar que es el funcionamiento de mi mente. Observar los patrones de funcionamiento y aceptarlos para que se liberen y así poder trascenderlos.